Dalilah: El deseo de una Sirena / Dalilah: A Mermaid's Wish

English version below

¡Saludos comunidad!

Ya es miércoles y es el mejor momento para leer otra gran historia de un personaje de Rising Star. En esta nueva oportunidad el personaje de la semana pasada venía representada por Dalilah. Y, aunque estoy llegando algo tarde a la iniciativa, quería contar su historia.

Esta iniciativa se está llevando a cabo en la comunidad de Hive NFTGame Latino. Si gustan pueden participar con un nuevo personaje en esta ocasión ya esta semana corresponde al personaje Thomas.

Que la disfruten

Su historia comenzó en las cálidas playas de Hawái, donde el sol brilla, la arena es hermosa y la gente se divierte sin parar. Ella una joven con muchos sueños por delante. Le gustaba ver a la gente disfrutar en la playa, siempre desde unas rocas que observaban hasta el horizonte.

Se dice, que era una princesa por su libertad de ir y venir a su gusto. Tal vez parezca extraño esta afirmación. Pero, ella estaba atada al mar, su familia, su hogar, sus costumbres pertenecían al océano. Pero, aunque parecía tener unas costumbres muy peculiares y hasta envidiables por muchos. Ella disfrutaba ver las costumbres de los humanos.

¿Dije de los humanos? ¿Acaso ella no era humana? Por increíble que parezca no lo era. Ella era una hermosa sirena. Así es, con una gran aleta verde azulado al color del sol, piel canela y una hermosa cabellera castaña.

Las personas nunca notaban su presencia, ella ocultaba muy bien su presencia ante ellos. Por lo menos cuando pasaban botes o las personas nadaban en su dirección. Ella, estaba muy sorprendida por el rápido crecimiento de la especie humana. Aunque las sirenas eran una especie más antigua, que los humanos, fue toda una sorpresa ver como los humanos iban dominando cada espacio del mundo, la tierra, el aire y hasta el agua. En poco tiempo incluso superaron a las sirenas que se vieron obligadas a esconderse de ellos.

Pero, Dalilah estaba maravillada con lo que podían hacer los humanos, todos esos majestuosos rituales que practicaban en las orillas de las playas. Esas danzas que practicaban esas bellas mujeres de piel tostada y maravillosa figura, unos movimientos tan estrambóticos que era inevitable para nuestra protagonista emular desde su épica vista. Cada movimiento lo hacía y movía su aleta con sensualidad. Si un marinero fuese testigo de esos movimientos sin duda se hubiera enamorado al instante.

Con el pasar del tiempo las chicas iban cambiando y las danzas iban evolucionando, el Hula, danza del vientre, bastones de fuego, hasta bailes árabes y Dalilah estaba siempre ahí, aprendiendo y disfrutando de estas artes y sus movimientos. Pero, una de las cosas que Dalilah más disfrutaba era ver la felicidad que esparcían estas bailarinas y bailarines. Todos se reunían en torno a ellas y las veían deslumbrados. Ellas hacían ese momento especial. Hacían esas playas muy especial. A veces, vemos un lugar y está vacío, puede ser bonito, pero la calidez humana puede hacer algo mágico con esos lugares. Eso, lo estaba sintiendo y admirando nuestra sirena desde su lugar especial.

Los años pasaron y poco a poco las bailarinas aparecían con menos frecuencia, las danzas iban desapareciendo y nuestra sirena aparecía y quedaba desilusionada. Solía escuchar a escondidas, que habían nuevos eventos en la isla, nuevos destinos que llamaban más la atención. Esto la entristecía mucho. Porque algo que ella amaba con todo su corazón se iba alejando. Supongo, para un humano era como que le quitaran la música que siempre ha amado. Esto a cualquier lo deprimiría. Dalilah se le partía el corazón cuando regresaba a su hogar con su familia y no pudo disfrutar de su actividad favorita, recordar esas hermosas playas solas con pocos o nadie divirtiéndose, sentía que la vida se le iba tanto a esa playa como a ella misma.

Una de esas noches de desolación. No lo pudo evitar, pero deseó que regresaran las danzas y deseo bailar con todas ellas. Esa noche durmió llorando y todos bien saben que cuando la lágrima de una sirena es iluminada por la luz de la luna llena, esta lágrima brilla como una estrella, luego sube al cielo y se convierte en una estrella fugaz. Estas estrellas son conocidas por cumplir los sueños más genuinos que el corazón pueda desear. Y, el primer deseo que cumplió es la de su creadora Dalilah.

Ella no sabía esto, se durmió y de repente su cuerpo empezó a elevarse a la superficie. A la mañana siguiente, aún dormía mientras flotaba en la superficie de una de sus playas favoritas, un pescador que pasaba la vio y la subió a bordo, vio que respiraba sin dificultad, pero seguía dormida. Él no notó nada extraño en ella, aparte de que le faltaba ropa, pensó que había sufrido algún tipo de daño, así que se apresuró a volver a la orilla para buscar auxilio. Él la vistió con unas mantas verdes que tenía.

Al llegar a la orilla, el pescador corrió a la guardia a buscar auxilio. En ese momento, ella despertó y saltó del bote, se dio cuenta que tenía piernas al tratar de nadar como solía hacerlo, como estaba en la orilla se pudo levantar, con algo de dificultad pero lo logró. No entendía muy bien que había ocurrido, se durmió con aletas y ahora tenía piernas. Pensó que era un sueño, así que se dejó llevar y decidió caminar a la playa, sintió un calor en sus pies que la hizo saltar al principio, pero luego se aclimató y luego enterró sus pies en la arena y lo sintió muy bien. Era algo increíble para ella sentir el sol de una manera diferente, poder respirar tan cómodamente y su piel sentía ese calor de la mañana que todos disfrutamos, le fue inevitable abrazar ese calor, estiró sus brazos al sol y se sintió muy bien.

Seguía jugando con la arena de sus pies, luego el agua iba y venía y la refrescaba, luego vio una pequeña fogata y se acordó de la danza de los bastones de fuego, tomó unos palos que servían para ese propósito y se dirigió hacia la fogata, encendió los bastones y fue como esos momentos en los que un niño puede acariciar el perro más rabioso y este lo recibe con cariño. Esos momentos donde la ignorancia y la inocencia le ganan al temor y a lo desconocido. Ella no se quemó, empezó a girar los bastones con gran habilidad, tal y como esas chicas lo movían. Solo replicaba los movimientos que religiosamente practicaba a la distancia de la playa y lo hacía muy bien.

De repente, algunos que iban pasando se le acercaron y se quedaron apreciándola con asombro. Algunos la animaban, otros la piropeaban, luego llegaron más personas y empezaron a grabar su gran habilidad. Ella se sentía en su elemento y de vez en cuando, miraba los gestos de quienes la observaban y se sentía feliz, porque eran los mismos gestos que las otras bailarinas producían. Se sentía plenamente feliz.

Cuando terminó su danza, todos le aplaudieron, hubo una gran ovación y muchas invitaciones a fiestas y eventos… Ella estaba cumpliendo su sueño. Pero, algo inusual pasó por su cabeza, una pregunta que una voz desconocida le hacía. ¿Quieres volver a tu hogar o quieres seguir viviendo tu sueño? Le pareció raro escuchar esta voz, así de la nada. Pensó que eso que estaba viviendo definitivamente no era un sueño tal y como pensaba. Respiró profundo el nuevo aire que estaba conociendo y supo que una vez que tomara una decisión no podía tomar el otro camino. Su familia le daba nostalgia y su pequeña hermana. Pero, miró a su alrededor y vio tantos rostros felices, vio la vida que le había dado a esa playa desolada que quiso aventurarse un poco más. Pero, lo que la decidió a seguir sus sueños por encima de su familia, fue mirar las rocas donde ella una vez estuvo. Se dijo, que ella podía servir de inspiración para otras sirenas quién sabe tal vez en un futuro desde esas mismas rocas su hermanita la estaría viendo con admiración. Tal vez Dalilah podría homenajearlas con sus danzas. Así que se decidió a seguir su sueño.

Así fue como Dalilah se volvió una de las bailarinas más exóticas y admiradas del mundo, la artista que le dio una oportunidad y una nueva vida a las danzas. Algo que pueden notar cuando está por empezar un acto es que ella siempre hace un saludo al océano, les rinde culto y luego baila con gran pasión al finalizar, se despide con respeto nuevamente del océano y luego observa al horizonte a ver si hay alguna cara conocida por ahí que le devuelva el saludo.

Greetings community!

It's already Wednesday and the best time to read another great story of a Rising Star character. In this new opportunity, last week's character was represented by Dalilah. And, although I'm a little late to the initiative, I wanted to tell her story.

This initiative is being carried out in the Hive NFTGame Latino community. If you like you can participate with a new character this week corresponds to the character Thomas.

Enjoy it

Her story began on the warm beaches of Hawaii, where the sun is shining, the sand is beautiful and the people are having non-stop fun. She was a young girl with many dreams ahead of her. She loved to watch people enjoy themselves on the beach, always from rocks overlooking the horizon.

It is said that she was a princess because of her freedom to come and go as she pleased. Perhaps this statement seems strange. But, she was tied to the sea, her family, her home, and her customs belonged to the ocean. But, although she seemed to have very peculiar customs and was even envied by many. She enjoyed watching the customs of humans.

Did I say humans? Wasn't she human? Incredible as it may seem, she was not. She was a beautiful mermaid. That's right, with a large blue-green fin the color of the sun, cinnamon skin, and beautiful brown hair.

People never noticed her presence, she hid her presence very well from them. At least when boats passed by or people swam in her direction. She was very surprised by the rapid growth of the human species. Although mermaids were an older species than humans, it was quite a surprise to see how humans were dominating every space in the world, the land, the air, and even the water. In a short time, they even overtook the mermaids who were forced to hide from them.

But, Dalilah was amazed at what humans could do, all those majestic rituals they practiced on the shores of the beaches. Those dances practiced by those beautiful women with tanned skin and marvelous figures, were such outlandish movements that it was inevitable for our protagonist to emulate them from her epic view. Each movement she made and moved her fin with sensuality. If a sailor had witnessed those movements he would have undoubtedly fallen in love instantly.

As time went by the girls were changing and the dances were evolving, the Hula, belly dancing, fire sticks, and even Arabian dances, and Dalilah was always there, learning and enjoying these arts and their movements. But, one of the things Dalilah enjoyed the most was seeing the happiness that these dancers spread. Everyone would gather around them and watch in awe. They made that moment special. They made those beaches very special. Sometimes, we see a place empty, which can be beautiful, but human warmth can do something magical with those places. That, our mermaid was feeling and admiring from her special place.

The years passed and little by little the dancers appeared less frequently, the dances were disappearing and our mermaid appeared and was disappointed. She used to hear on the sly, that there were new events on the island, new destinations that attracted more attention. This made her very sad. Because something she loved with all her heart was drifting away. I guess, for a human, it was like having the music she had always loved taken away. This would depress anyone. Dalilah was heartbroken when she returned home to her family and was unable to enjoy her favorite activity, remembering those beautiful beaches alone with little or no one having fun, she felt like life was slipping away from that beach as much as from herself.

One of those nights of desolation. She couldn't help but wish the dances would come back and wish she could dance with them all. That night she slept crying and everyone knows that when a mermaid's tear is illuminated by the light of the full moon, this tear shines like a star, then rises into the sky and becomes a shooting star. These stars are known to fulfill the truest dreams the heart can desire. And, the first wish it fulfilled is that of its creator Dalilah.

She did not know this, she fell asleep and suddenly her body began to rise to the surface. The next morning, still asleep as she floated on the surface of one of her favorite beaches, a passing fisherman saw her and pulled her aboard, he saw that she was breathing without difficulty, but still asleep. He didn't notice anything strange about her, other than that she was missing clothes, he thought she had suffered some kind of damage, so he hurried back to shore to seek help. He dressed her with some green blankets he had.

Upon reaching the shore, the fisherman ran to the guard to seek help. At that moment, she woke up and jumped out of the boat, she realized that she had legs when she tried to swim as she used to do, as she was on the shore she was able to get up, with some difficulty but she made it. She did not understand very well what had happened, she fell asleep with fins and now she had legs. She thought it was a dream, so she let herself go and decided to walk to the beach, she felt a heat in her feet that made her jump at first, but then she acclimatized and then she buried her feet in the sand and it felt great. It was an amazing thing for her to feel the sun in a different way, to be able to breathe so comfortably and for her skin felt that morning warmth that we all enjoy, it was inevitable for her to embrace that warmth, she stretched her arms out in the sun and it felt great.

She kept playing with the sand on her feet, then the water came and went and refreshed her, then she saw a small bonfire and remembered the dance of the fire sticks, she took some sticks that served for that purpose and headed towards the bonfire, she lit the sticks and it was like those moments where a child can pet the most rabid dog and it receives it with affection. Those moments where ignorance and innocence win out over fear and the unknown. She didn't get burned, she started twirling the canes with great skill, just like those girls moved it. She was just replicating the movements she religiously practiced at the distance of the beach and she did it very well.

Suddenly, some people who were passing by approached her and stood and watched her in amazement. Some cheered her on, others complimented her, and then more people arrived and began to record her great skill. She felt in her element and from time to time, she looked at the gestures of those who were watching her and felt happy because they were the same gestures that the other dancers produced. She felt completely happy.

When she finished her dance, everyone applauded her, there was a standing ovation and many invitations to parties and events... She was fulfilling her dream. But, something unusual went through her head, a question that an unknown voice asked her. Do you want to go back home or do you want to continue living your dream? It seemed strange to her to hear this voice, just out of the blue. He thought that what he was living was definitely not a dream as he thought. He took a deep breath of the new air he was meeting and knew that once he made a decision he could not go the other way. His family was making him homesick and his little sister. But, she looked around and saw so many happy faces, saw the life she had given to that desolate beach that she wanted to venture a little further. But, what decided her to follow her dreams over her family, was to look at the rocks where she once stood. She said to herself, that she could serve as an inspiration for other mermaids, who knows, maybe in the future from those same rocks her little sister would be watching her with admiration. Maybe Dalilah could honor them with her dances. So she decided to follow her dream.

This is how Dalilah became one of the most exotic and admired dancers in the world, the artist who gave dances a chance and a new life. One thing you may notice when she is about to begin an act is that she always salutes the ocean, worships them, and then dances with great passion at the end, respectfully says goodbye again to the ocean, and then looks to the horizon to see if there is a familiar face out there to return the salute.

La imagen de Dalilah fue tomada del juego de Rising Star
The image of Dalilah was taken from the Rising Star game.

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