La Reina del Jardín de Verano

Hydrangea macrophylla: La Reina del Jardín de Verano

Pocos arbustos con flores llaman tanto la atención como la Hydrangea macrophylla, comúnmente conocida como hortensia de hoja grande. Con su exuberante follaje y sus espectaculares flores, no es de extrañar que esta planta se haya convertido en un elemento esencial en los jardines de climas templados. Ya sea como arbusto de borde, planta de maceta o pieza central de un jardín campestre, la Hydrangea macrophylla ofrece encanto y color desde finales de la primavera hasta el otoño.

Una Belleza Botánica
Originaria de la costa de Japón, la Hydrangea macrophylla forma parte del gran género Hydrangea, que incluye más de 70 especies. Es especialmente admirada por sus hojas anchas y ovaladas y sus grandes cabezuelas redondeadas, que pueden medir hasta 20 cm de diámetro. Estas flores se presentan en dos variedades principales: Formularios:


Hortensia de cabeza de fregona: Estas son las flores más emblemáticas de la hortensia, con densos racimos de flores estériles que forman una cúpula o globo. Hydrangea macrophylla: Más delicadas y naturalistas, las Hydrangea macrophylla tienen un centro de flores fértiles rodeado de un anillo de vistosas flores estériles.

Magia del cambio de color
Una de las características más fascinantes de la Hydrangea macrophylla es su capacidad de cambiar el color de sus flores según el pH del suelo. Esto no es solo un mito, sino una reacción con respaldo científico a la disponibilidad de aluminio en el suelo.
Los suelos ácidos suelen producir flores azules.
Los suelos neutros a alcalinos tienden a producir flores rosas o incluso rojas.
Los tonos morados o abigarrados pueden aparecer en condiciones de suelo de transición o ligeramente desequilibradas.
Los jardineros suelen manipular el pH del suelo utilizando enmiendas como sulfato de aluminio o cal de jardín. Esta sensibilidad natural al pH añade un elemento divertido e interactivo al cultivo de hortensias de hoja grande.